Todos conocemos los beneficios que aporta una vida activa a nuestro cuerpo y mente, como mejor circulación sanguínea, mayor resistencia, y estrés reducido. Sin embargo, los largos trayectos en el tráfico al gym, las membresías desaprovechadas y los pocos espacios al aire libre para ejercitarse son los principales detractores de los buenos hábitos.