Muchos de nosotros comenzamos con el hábito del ahorro con el propósito de construir un futuro financiero sólido. Sin embargo, el ahorro tan sólo es el primer paso para ello, ya que, para realmente beneficiarnos de un crecimiento financiero, necesitamos aventurarnos en el mundo de las inversiones.
Probablemente has escuchado de propiedades que se promocionan como en «fase de preventa». Varios de nosotros nos hemos preguntado si realmente hay una diferencia, o si nos conviene invertir durante la preventa. La respuesta a esto dependerá de tus objetivos.
Los bienes raíces son una inversión segura, pero eso no significa que se deba adquirir la primera propiedad que se nos cruce. Invertir es una cuestión de estrategia, de elegir la opción indicada que nos dé, y no que nos quite. Es decir, debemos analizar nuestras oportunidades de inversión inmobiliaria y elegir la que garantice mayor plusvalía.
Adquirir una propiedad inmobiliaria es un motivo de celebración, y ser un propietario responsable lo es aún más. Pero, ¿cómo serlo? Comienza estando al tanto de los trámites y gastos que necesitas para asegurar la legalidad de tu compra.